Siempre lo cuento, cuando teníamos unos 22 o 23 años y vivíamos felizmente en casa de nuestros padres recuerdo haber ido a un restaurante con los amigos. Muchos pedimos pasta, alguno arroz y uno verdura. Me sorprendió, pero en seguida deduje que había algo importante que le diferenciaba del resto: se había independizado, o lo que es lo mismo, comía pasta cada día y echaba de menos la verdura de su madre.
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Verdura con patatas |
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